otras veces el presunto museo o la sala de exposiciones bien puede ser un pub o un bar donde mientras tomas algo puedes ver el trabajo de alguien colgado en las paredes, a quien posiblemente nunca llegarás a conocer en persona.
Pero siempre quedará el rato y la conversación con el camarero y alguien en la barra.
En este caso no iba cargado de libros. Solo con algún volúmen de cierto comic.