Es una de esas acuarelas raras que se me ocurren a veces. El lugar existe, y es una carreterilla que une uno de los barrios de mi ciudad con el centro viene del cementerio de ese barrio y tiene un nombre un tanto gótico por aquello de que aparece la palabra "Animas".
A este cuadro le puse un titulo; "Pesadilla #125". La verdad es que la idea estaba bastante clara, el día en que estuve tomando notas ahí no, ya se ve como se presentaba el cielo, luego de pronto se paró, recogí todos los cachivaches y se quedó en el caballete.
Iba a ser un regalo...
No diré su estado actual.
Wagner Tannhauser Overture Karajan
There's a haunting beauty in how memory, place, and mood collided on that canvas—maybe it was never meant to be a gift, but a mirror.
ResponderEliminarFue un rompecabezas,eso seguro.
EliminarEl cielo me gusta, pero ni aun con su color adivino una pesadilla.
ResponderEliminarLo vi claro desde el primer momento pero luego se complico demasiado.
EliminarSe intuye que el hombre se ha metido donde no debía. Su imagen está parpadeando, a punto de desaparecer. Luego tendrás que rellenar el hueco que deje.
ResponderEliminarAbrazooo
En realidad no hay nadie.
EliminarUn abrazo.
La línea que separa las pesadillas nunca esta muy clara. El hombre camina, de momento todo parece tranquilo, pero en el fondo se intuye algo que, quizás, no acabe del todo bien.
ResponderEliminarClaro, por eso está como está.
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ResponderEliminarLa acuarela me gusta, tiene unos colores muy bonitos y no me parece para nada una pesadilla, pero el personaje, ay! El personaje…. Borroso e indefinido.
Pesadilla: Él estaba en un lugar conocido, no hubiera tenido que sentir ningún miedo, conocía este camino de sobra… pero aún así, algo lo paralizaba, como si fuera a sudecer algo horrible e irreparable. Y no era el lugar, era el personaje, que era él mismo y no lo era, al mismo tiempo. "Si me muevo" soñaba, "alguno de los dos va a desaparecer y a lo mejor soy yo mismo el que desaparezco". Inmóvil i aterrorizado, esperó despertar, y aún así no conseguía saber quién era el verdadero o el impostor.
Un abrazo, Erik!
Desde luego el lugar es mi lugar favorito aunque ahora está un poco cambiado, pero vuelvo intermitentemente a él, lo he hecho en todas las estaciones y en todas lo he fotografiado cien veces.
EliminarAbrazos.
Me gusta la acuarela... quizás la pesadilla vino después...
ResponderEliminarBesos
La acuarela fue la pesadilla misma, Paula.
EliminarBesos.
A mí me gusta es bonita. Ese pueblo lo conozco, hace poquito estuve por ahí. Besos.
ResponderEliminarEs el mío, claro.
EliminarBesos.