el fantasma del paraíso

 

            Nunca lo había pensado. Pero es que tampoco debe ser muy corriente encontrarse con un clon. Y eso es lo que me ha ocurrido esta mañana un poco antes de llegar a la plaza del cementerio. Eso sí visiblemente más torpón él. No es que yo ande dando carreras de fondo pues este último mes ha estado siendo nefasto para mis andares. Mi tobillo ya toca prácticamente suelo (eso me ha dicho la fisio... Como si no lo supiera...) me imagino que las borrascas que se suceden unas a otras han tenido mucho que ver, lo cierto es que duele un monton. Pero yo no renuncio a mis cinco o seis kilómetros porque lo contrario sería el dique seco y eso no está en mis planes, de momento. 

            Luego he pensado que al fin y al cabo no es del todo extraño, porque una gorra, gafas de sol y mascarilla ahora mismo no es tan inusual. Pero además llevaba un bastón (más cuco, que el mio de andar por la naturaleza, que es más tosco y natural de árbol. Paro otros casos cucos tengo el de la calavera) por lo demás salvo los pantalones, él unos vaqueros de ahí para arriba  no había mucha diferencia. Le he sobrepasado a la entrada de la plaza y he visto que se ha quedado tan sorprendido como yo mismo unos minutos antes, al verme. Luego yo me he perdido en el cementerio.

             Como cada día una vez fuera de la Vera Cruz ya, me dirigi al 'Espolón' en el parque de la Coria, no hemos parado de pasarnos el uno al otro durante todo el trayecto en el parque  debido a mis paradas para tirar alguna que otra foto o el pararse como yo otras veces a mirar esta o aquella planta en el camino. 

             Extrañamente, ya fuera del parque, a pesar del recorrido único no he vuelto a verlo, a pesar de volver sobre mis pasos, y aún mirar desde arriba del todo de una muralla sobre el 'Arco de la puerta de la Coria' desde donde se divisa todo el parque y en contrario. No por nada y más bien por hacerle una foto. Pero...

             Es como si se hubiese disuelto en el aire.