LA INVITACIÓN
Recibes una carta escrita con una letra manuscrita preciosa,
¿Quién escribe a mano hoy en día?
El texto es breve y claro:
El escribiente anónimo te invita a cenar al restaurante X
(Es uno de los más caros de la ciudad y llevas mucho tiempo queriendo ir, pero no te lo puedes permitir).
No te dice si os conocéis o no. Pero que será la oportunidad de tu vida y que no te arrepentirás si acudes.
Para identificaros, cada uno llevará un libro y una flor.
Tiene que ser un libro muy especial. Por su título o autor; por lo que significa para ti; por lo que supuso su lectura, porque es el que más veces has releído…
Tú decides.
La flor tiene que representarte.
Firma simplemente con una letra mayúscula.
Ni siquiera sabes quién pagará ni las intenciones.
¿Acudirás a la cita?
VadeReto (MARZO 2024)
JascNet - Acervo de Letras
Este es el reto del mes de Marzo:
Como cada mañana después de mi paseo matutino cuando aun casi ni han puesto las aceras y el sol empieza a iluminar tímidamente la ciudad, tras el cerro coronado por la "Molineta" lo primero que hago al entrar en el portal es mirar mi buzón de correos. Como cada día también, intento coger la correspondencia sin abrirlo introduciendo los dedos a través de su boca, y como cada día al final tengo que recurrir a la pequeña llave que llevo en el bolsillo. Hoy en concreto el reto se presentaba aún mas imposible si cabe ya que en lugar de sobre, que al fin y al cabo suele ser lo bastante alargado para poder intentar pillarlo haciendo pinza con los dedos anular y corazón se trataba de un papel doblado al fondo del buzón. En fin que lógicamente la llave fue la solución mas corta y la única.
En efecto era una nota muy escueta en la que alguien me invitaba a un restaurante de la plaza mayor, nada barato por cierto si tenemos en cuenta que estamos en una ciudad turística. Y el texto rezaba aquellas palabras tan manidas en estas citas de desconocidos; Deberemos llevar a fin de identificarnos una flor y un libro que sean a ser posible los de mayor preferencia para cada cual. (Enseguida me recordó aquella película; "Tienes un e-mail"). Pero lo que realmente me mosqueo fue aquella caligrafía extraña como si estuviera realizada con "la mano tonta" (izquierda en este caso si es que fuera diestro) pero que alguna letra o mas de alguna eran como un verdadero deja-vu. Tuve la sensación de que ya había estado ahí antes.
Llegado el momento me pille mi ejemplar de "El fantasma de la opera" y como la flor ya existía dentro a modo de marca-paginas, un capullo de rosa carmín oscuro desecado por el tiempo transcurrido entre sus paginas, pensé que mejor lo llevaría en la mano en este caso junto con el libro.
Tengo la manía de la puntualidad, por eso llegue con antelación de unos minutos al lugar, y para mi sorpresa en una de las mesas, alguien había sido aun mas puntual, descansaba junto aun vaso de agua un libro; un ejemplar de una edición bilingüe de un libro muy conocido para mi de Edgar Allan Poe, y sobre él una ramita de 'Lavanda' fresca.
¡Cambie de color..!
Ahora recordé aquella letra en la nota por mas que hubieran intentado encriptarla. Solté mi libro junto aquel otro, pero en lugar de poner mi flor sobre el libro o la mesa abrí este por las paginas que marcaba mi rosa y me marche rápidamente.
Seguramente habría ido al lavabo y por eso estaba aquel libro junto a la flor y aquel vaso solitarios, pensé.
Después ya en el exterior tras la esquina me quede un rato observando como al volver Ella a la mesa y ver el libro, sin tocarlo, se acerco y leyó las paginas expuestas y rápidamente levanto la cabeza mirando hacia la ventana como quien busca un fantasma. Por su expresión me di cuenta que enseguida había reconocido mi libro y por ende quien lo había dejado allí.
Erik y Christine, por unos momentos, habían estado a punto de volver a estar juntos.
Y... Fin.
P.D. Naturalmente ni su nombre realmente es Christine ni yo su Erik. Pero igual.
Dicen que "segundas partes nunca fueron buenas" pero en el amor, quien sabe? Igual las segundas oportunidades nos dan gratas sorpresas! Je je! Me ha gustado que Erik y Christine salgan en la página del libro que has dejado abierto! Un abrazote Erik!
ResponderEliminarPues es mas real de lo que parece, aunque en este caso el vizconde de Chagny aunque se llevó a mi Christine (E) al final no terminaron juntos. Nunca me cayeron bien los franchutes y desde entonces aun menos.
EliminarAbrazos.
Un relato muy romántico, incluso el final... aunque no fuera del todo real.
ResponderEliminarNo sé si yo acudiría a la cita... tendría que ser muy tentadora. ;-)
Besos
Es que no se puede tener todo, todo el tiempo.
EliminarBesos
A veces es mejor dejar las cosas en un bonito "y si..." que estropearlas con la realidad de nuestros días...
ResponderEliminarPues seguramente.
EliminarNah, yo me hubiera quedado en mi casa.
ResponderEliminarSaludos,
J.
Es que la curiosidad mató al gato.
EliminarTe ha quedado un relato redondo, redondo. Todo muy bien relacionado. Bravo!
ResponderEliminarYo no sé si hubiera sido capaz de ir…
Un abrazo, Erik.
Todo depende de la curiosidad que cada uno tenga. Pero yo en mi caso sí que hubiera ido, eso es seguro del todo.
EliminarSalud.