Desde hace dos días al menos he vuelto a sentir esa sensación que tanto me agradaba y que recuerdo desde pequeño cuando llegaba el otoño y lego el invierno con sus lluvias. Me encantaba sentarme entonces junto a aquella ventana enorme que llegaba hasta el techo de madera surcado de vigas de ese mismo material de color caoba y escuchar el chapotear de la lluvia afuera. Y luego cuantas noches en ese mismo lugar ya con ella y con esa edad en que todo es bonito y parece que va a durar para siempre, también escuchando músicas y acurrucada ella entre mis brazos al escuchar la lluvia y el viento a ratos mientras yo le dibujaba historias góticas al calor del brasero.
Ahora frente a esta pantalla mientras escribo escucho la borrasca de turno gritar ahí afuera.
Y mi música.
Hola, Erik:
ResponderEliminarMe identifico de manera plena con tus palabras y te felicito por tus fotografías.
Siempre me ha gustado el otoño, incluso ahora que vivo en el invierno.
Gracias, Erik.
La verdades que soy mas del invierno que del otoño, pero me encanta la lluvia.
EliminarSalud.
Es una de las cosas con la que disfruto más, sentarme delante del ventanal del balcón y ver como cae la lluvia y olerla.
ResponderEliminarBonitas fotos.
Besos
Es una gozada, Paula, me encanta tirarme en la hamaca y escuchar y mirar la lluvia.
EliminarBesos.
A disfrutar del otoño y de la lluvia (a ver si hay suerte).
ResponderEliminarUn abrazo, Erik!
A ver si sigue.
EliminarBesos
Hola Erik, es mi estación favorita, pero por aquí ayer tuvimos un huracán, no estamos acostumbrados a eso. Fue impresionante.
ResponderEliminarPor lo general, me gusta pasear bajo una ligera lluvia y verla desde la ventana si es fuerte.
Un beso.
Preciosa la música escogida, voces inconfundibles.
Por aquí llovió también, algo fuerte pero no tanto era mas bien parecido a otras veces aunque los días anteriores si que hizo mucho viento pero lo mas que se rompió fue un arbusto muy bonito. En Cáceres fue peor. Aunque bien venida sea el agua.
EliminarBesos
He sentido algo parecido, pero algo ha cambiado, la lluvia. La lluvia de mi niñez era un animal domesticado que estaba varios días rondando por mi casa. La lluvia de estos días es una fiera salvaje que lo arrasa todo durante unas horas y luego desaparece durante días. No dejo de pensar que la naturaleza se han enfadado con nuestra raza... y razón no le falta..
ResponderEliminar"Mama naturaleza se va a cabrear y va a mandar a esta mosca cojonera que somos los humanitos a la mierda"
EliminarEs una frase que con algunas variaciones he venido repitiendo en este mismo blog durante muchos años.
No estaba tan pirado como pensaba alguno, cuando me refería a que de alguna manera se nos iba a quitar de encima. Por que según donde, vamos a tener serios problemas para aclimatarnos al nuevo medio.
-¡Como me cabrea tener razón a veces!, pensaba en ocasiones. Pasaba mucho cuando trabajaba en el s. financiero. En ciertas cosas no suelo confundirme.
En fin hay que acostumbrarse porque ahora esto viene así mientras no nos decidamos a coger al toro por los cuernos. Y aun tenemos un poquito de tiempo, muy poco, para arreglárselo a los que vienen detrás.
Salud.
Que bonita la lluvia tras los cristales y con una buena chimenea mejor, aunque en el braserito que bien se está, contando historias antiguas. Besos.
ResponderEliminarEso es una maravilla.
EliminarBesos