Te diré esto.
Ninguna recompensa eterna nos perdonará ahora.
Por malgastar el alba.
Vuelvo a aquellos días, todo era más sencillo y más confuso.
Una noche de verano, yendo al muelle.
Me encontré con dos jóvenes chicas.
La rubia se llamaba Libertad.
La morena, Empresa.
Hablamos y me contaron esta historia.
Ahora escucha esto…
Te hablaré sobre Texas radio y su gran ritmo
Suavemente conducido, lento y loco.
Como algún nuevo lenguaje.
Llegando a tu cabeza con el frío, furia repentina de un mensajero divino.
Déjame hablarte sobre la angustia y la pérdida de dios.
Divagando, divagando en la desesperada noche.
Aquí fuera no hay estrellas en todo el perímetro.
Aquí fuera estamos colocados.
Inmaculados.
(J. Morrison)
¡Feliz finde!
ResponderEliminarSalud
Otra entrada romántica.
ResponderEliminarBesos.
Bonita fotografía.
:)
Feliz y lluvioso.
ResponderEliminarSaludos
Mas bien lisérgica.
ResponderEliminarBesos
ResponderEliminarEl alba no debería malgastarse... vivirla o soñarla son mejores opciones.
Besos
El alba suele tan espectacular como el ocaso, y yo me subo allá arriba para verlos mejor.
ResponderEliminarBeso