me gusta perderme por esas casetas durante los días que dura esa feria. Es parecido a cuando visito alguna ciudad en vacaciones o en algún viaje y me pierdo a ratos en esas librerías perdidas en ciertas callejuelas porque hasta ahora he tenido la suerte de encontrarme en alguna de ellas como en la feria, con algún autor o editor charlando con el librero de turno, y es extraño pero te puedes entrometer en la conversación y nadie parece molestarse, al contrario, en esos momentos es como si ya llevaras ahí con ellos desde un principio.
Y este viernes y sábado me ocurrió en esa plaza de mi pueblo. Yo me lo paso bien de esa manera, hablando con aquella autora a la que llegue, tarde, casi al final de su presentación, por una canción de The Velvet Underground que salía de la carpa y me llevo a conversar un ratito con ella sobre algún libro que por cierto nos gusto a los dos leer en su día y que seguramente volveremos a releer ambos.
O algunas editoras con las que se hablo de lo humano y lo divino sobre esas letras impresas y después ya con mis niñas, que como era de esperar nos volvimos con un montón de libros cada uno. Para irritación de su madre eterna por la falta de espacio para buscarles un lugar donde descansar. Pero ese solo es un mal menor teniendo en cuenta los buenos ratos cosechados antes de ese presunto descanso para coger polvo.
Seguramente nos volveremos a encontrar, bien en la próxima edición o cuando vaya a la capital.
Es como cuando te pones a leer. El mundo físico se difumina por unos momentos, y con los tiempos que corren es de un agradecido superlativo.
Músicas en esta entrada: Beth Gibbons & Rustin Man - Mysteries (subtitulos español)
Asi se pasea por la feria, dejando que los pensamientos se enreden en cada portada. Un abrazo
ResponderEliminarMe alegra que hayas disfrutado.
EliminarBesos.
Entretenerse, en fin.
EliminarUn abrazo
Gracias Amapola, con esas cosas me suelo entretener mucho.
ResponderEliminarBesos
Hola, Erik:
ResponderEliminarFueron muchas las veces en las que disfruté más acudiendo a una convocatoria cultural que disfrutando del objeto de la convocatoria: ferias del libro, festivales de cine, salones del cómic… El contacto con autores, profesionales técnicos o aficionados al medio era reconfortante.
Me he visto obligado a dejar de asistir a estas convocatorias. Pero gracias a tu relato he visitado la feria del libro de tu pueblo.
Gracias por el paseo, Erik.
Vaya... Siento que no puedas, la verdad es que yo no suelo ir mucho, pero en cuanto tengo ocasión aprovecho y ya ves no me aburro.
EliminarSalud
Pellizcos de vidas que nos hacen vibrar.
ResponderEliminar¡Qué hermosura de compra!. Un día de estos sales de tu casa.😉
Besos.
Eso dice la madre de mis niñas, que los libros no tienen ya sitio donde dormir.
EliminarBesos
Lo veo muy bien Erik, al fin y al cabo que es una feria aparte de indagar en los libros o buscar alguno en particular. Las charlas con los autores o libreros resultan siempre de lo más gratificantes, es como si nos llegásemos a conocer desde hace tiempo y siempre o casi siempre existe esa buena armonía y cierta complicidad.
ResponderEliminarUn abrazo.
Ya te digo, nos tuvimos que hacer una foto con uno de ellos y todo, claro que en tres días acabas por conocerte con ellos.
EliminarSalud
También disfruto con esas ferias ambulantes de libros y siempre voy a ellas porque algo se encuentra siempre.
ResponderEliminarLa música de hoy es maravillosa.
Claro, cada tema necesita su música.
EliminarBuenas madrugadas.