Como me cabreaba tener razón cuando trabajaba.
Pero como me he tirado mas de media vida trabajando en el sector financiero (no me gusto nunca) al fin aprendí a verlas venir y me temo que este puto mundo como lo conocíamos va a ser que ni parecido (y no quiero ser negro pero no me gusta lo que veo venir).
Ahora que ya ni me acuerdo de todo aquello y al día siguiente de dejarlo. Como en las pelis... monte una de ellas, metí todos mis cachivaches en esa caja de archivo y decidí que ahora me iría a mirar, hacer fotos de todo lo mirado y hasta que durara. Sin tiempo, sin horarios a mi aire (la verdad es que siempre he ido a mi aire a pesar del jefe de por encima Siempre me decía cabreado: Es que no se puede discutir contigo. ¡Al final aunque me dices que si. Se que vas a hacer lo que te de la gana... )
Por un momento miro mi mesa y por primera vez como los chorros de oro. El caos que era la normalidad ha pasado a la historia. El mundo se presenta brillante y el reloj ha dejado de hacer ruido.
Y empece a mirar, parar la vida en un fotograma y todo eran colores. La gente ya se ve... Camina, habla se relacionan, ríen, son mas o menos felices y viven.
El fin de semana la plaza se llena de colores y de mas gente tomando el aperitivo sin pensar que esto no sea los mas natural. Al fin y al cabo estamos en lo alto de la pirámide.
Aun hay color a pesar de la mascara, Y la verbena.
Yo sigo allá arriba paseando como cada mañana pero hoy después de días de noticias mas o menos grises que se van poniendo cada vez mas negras miro abajo y me pregunto: ¿Que hacen todos esos ahí fuera de su ciudad, en la mía? Se supone que hoy ya no deberían estar ahí.
Miro al fondo. Los soportales siempre llenos, sobre todo en fin de semana, se ven vacíos. Las tiendas, las golosinas cerradas. Ni un alma del pueblo. Ha empezado el gris oscuro.
Y por eso creo... la foto empieza a perder color.
Han pasado un montón de días, de encierros, pero ya se puede volver a tomar el sol. Estoy sentado en una terraza y veo a esa chica. La veo en blanco y negro a pesar de la aparente normalidad yo sigo viéndola en blanco y negro.
Me fijo un poco más.
Observo la mascarilla que lleva prendida en la cintura justo bajo el codo derecho. Un tiempo atrás habria llamado mi atención, seguramente, alguna otra cosa.
No pasa nada, pienso, es sábado por la mañana y hay que ordeñar el cajero que esta noche sigue la marcha.
¡?
*
¡Y esas dos!
¿Que coño se supone que hacen?
No sabes cómo te comprendo, al menos hoy.
ResponderEliminarA la larga los problemas que pueden venir pueden ser tremendos. Sobre todo si el personal pierde la paciencia, que la perderá.
EliminarBesos
creo que cada cual vivirá "su" nueva normalidad.
ResponderEliminarY ni de coña serán todas iguales.
Espero que la mía conserve los colores
El problema es que de rebote como decía el cura no vale.
EliminarYa veremos.
Pues sí, Erik, yo también estoy muy preocupada por el comportamiento tan poco responsable de un gran número de ciudadanos de este país. Nos hemos olvidado muy prontito del miedo y el encierro y luego eso sí: a aplaudir los primeros en el balcón. POSTUREOOOO. que es lo que le gusta a la masa. Pues hay que recordarles lo mal que lo han pasado y lo pasan los sanitarios, el colapso de los hospitales y las UCIs, el miedo de los enfermos con patologías concretas, etc... yo es que lo flipo con el personal.
ResponderEliminarBesos
Ginebra. Yo lo primero que pienso cuando veo cosas, es en los sanitarios que aun no han podido descansar. Y solo por eso habria que pensar en que se hace. Hoy he visto unas imagenes de una disco de la Madrila y parece que no pase nada.
EliminarY luego cada uno pone sus tareas y que puede ocurrir.
Mi hija esta haciendo una investigación sobre el cáncer de piel en la Autónoma y como han empezado los exámenes de la selectividad les han aconsejado que estos días no vayan al laboratorio. Pero ella no puede hacerlo porque tiene los cultivos de sus células en marcha y tiene que irradiarlas, lleva tanto tiempo perdido con estos últimos tres meses que no le queda otra que ir.
Pero los humanoides somos como somos.
Este fin de semana alguien cercano, me estuvo dando lecciones de "normalidad" sin despeinarse, en fin... NO ENTIENDO LA BOBALIZACIÓN QUE NOS RODEA.
ResponderEliminarBesines utópicos.-
La normalidad es la misma que había el uno de marzo por no irnos muy lejos. Vamos que el bicho sigue ahí igual de virulento que entonces. Ojos que no ven corazón que no...
ResponderEliminarBesos
Yo sigo en mi casa. Aquí veo colores.
ResponderEliminarBeso
Colores
EliminarPués eso es bueno
Beso
Te veo feliz.
ResponderEliminarBesos.