los Pájaros

 Amanece la mañana lluviosa. Luego se llena el cielo de nubarrones de tormenta que a ratos dejan pasar algo de la luz del presunto sol que va subiendo lentamente. Pero al fin las nubes se adueñan del entorno convertidas ahora en niebla que me deja un decorado para no olvidar la estación. El sol terco sigue peleando a ratos. Y ahora en la tarde no queda ni rastro de una nube en ese cielo y los colores del otoño vuelven a salir aunque desde mi terraza mas parecen de primavera por lo que se deja ver. Es hora de dormitar un rato en la hamaca esa calma chicha vespertina.

De pronto un ruido seco en la terraza, y veo como las pinzas de la ropa bailan en los cordeles y los carillones  tintinean  como locos. El viento silva en la puerta de la terraza.  Ha tirado una gran regadera de plástico.

Claro, me asomo a ver y el espectáculo esta en el cielo. 

Los pájaros están como locos esta tarde. Sí, va siendo su hora de regresar a las ramas y tejados que les cobijaran esta noche pero no es como otros días. Giran de un lado a otro y me maravilla ver como a pesar de la velocidad y los cortes, cambiando de sentido el vuelo, ni uno solo de ellos a pesar de la multitud y la proximidad no llegan a rozarse una pluma, a pesar de separarles a veces en su carrera tan solo unos milímetros. En un momento pensé que podía ocurrir algo y lo sentían venir, pero luego no, porque los perros del vecino esta tarde están anormalmente tranquilos y hay que ver la lata que dan simplemente al paso de una ambulancia (ventajas de pasar la carretera por en medio del barrio hacia los centros hospitalarios).

En fin que estos bichos esta tarde estaban muy inquietos pero ha sido todo un espectáculo. Ver como evolucionaban, se posaban y volvían a levantar el vuelo frenéticos. Hasta que por fin se han ido colocando para dormir. Ahora el silencio en la terraza es absoluto. Hasta el viento se ha ido a la cama. Solo un frio gélido cae. Y si sigue así sin una sola nube, veremos hielo.

Músicas en esta entrada :  Supertramp- Don’t Leave Me Now