No yo no volvía a Manderley. Volvía por fin al Espolón después de la restauración del paño de la muralla hundido ése invierno pasado.
Ya me había colado algun dia atrás, pero ahora se ve que el personal se ha cansado de que no terminarán de quitar la alambrada mientras la obra estaba en marcha y lo han apartado.
He vuelto a entrar y he vuelto cargado de nuevo con mi música a cuestas. Y según la canción que salta, pues eso que te viene a la cabeza.
Es extraño, pero siempre al llegar a este lugar. Justo ahí, ese trozo de muralla junto a esa torre, la temperatura baja unos grados. Bastantes respecto del resto del camino por mucha temperatura que haga como estos días. Una vez que pasas esos pocos metros la temperatura vuelve a subir. Pero siempre ocurre lo mismo. Me imagino que a mi me llama más la atención porque paso muy a menudo y siempre es igual que ocurre esto.
Al otro lado de la muralla que se derrumbó al que se accede por una puerta minúscula que no llegó a caer aunque sí que quedó parcialmente cegada por los bloque enormes de granito caídos, aún sigue en pie la alambrada y como ahora poco personal pasa la maleza ha tomado prácticamente el camino. Pero ahí está de nuevo mi parque de la Coria.
Al llegar a la altura del camino en que entre los árboles se pueden ver las ruinas de la vieja abadía de La Magdalena no he podido dejar de pensar en esas últimas escenas de la película de A.Hitchcock de las piedras que quedaban en ruina de Manderley tras el incendio.
Una vez fuera del parque me di de bruces con estas dos imágenes. Que no quedan mal por el regustillo a gótico.
Músicas en la entrada: Buyka & Sahankar - Casi uno.
Un lugar de película y esa amapola me ha emocionado.Abrazos
ResponderEliminarLo del cambio de temperatura ¿no será por las personas caídas en ese lugar?, o quizás algo más sencillo, porque el grosor de las paredes no dejan pasar la luz del sol.
ResponderEliminarDe todas las fotos me llaman la atención dos, la del camino y la de la escalera de piedra; me encanta ver como la vegetación "se come" todo lo hecho por el hombre.
Grandes Anoushka y Buika.
Besos
Me imagino que debe ser por la humedad más bien, porque los muros son iguales durante metros y metros de muralla, antes y después. Quiero pensar.
EliminarSi, a mi me gusta cuando la naturaleza reclama sus lugares. Especialmente las carreteras esas que quedan abandonadas porque han construido alguna autovía u otra nueva paralela.
Me encantan los decorados distópicos.
Besos
Más bien debe ser porque ahí, debajo de la tierra que pisas, discurre un acuífero, se me ocurre... una razón lógica y/o científica hay, desde luego, no vayamos a imaginar que ese lugar está poblado de fantasmas como Manderlay;)))
ResponderEliminarSaludos y a seguir con esos paseos tan chulos
En mi pueblo eso ocurre en todo el pueblo. Cada vez que haces un agujero sale agua. Casi todas las cocheras que están bajo las casas tienen bomba de achique y todas las casas antiguas tenían pozo propio.
EliminarMás bien creo que es la depresión del terreno en el lugar junto a la humedad. De cualquier forma es un poco rollo cada vez que paso porque el fresquillo es molesto a pesar del calor.
Es más bien la sensación.
Mis padres están justo tras esos muros. Y unos metros más allá una queridisima amiga muy joven.
Salud