Lo he dicho alguna vez en mis entradas. Mientras camino durante mis paseos o ejercicio, llámese como se quiera. No paro jamás de mirar y observar todo lo que me voy cruzando, y conste que es mucho durante una hora y media lo que se puede llegar a observar y mas.
Esta es de esas mañanas en que la luz es maravillosa para sobre todo tirar fotos y no solo ya mirar, que también.
Suelo ser muy hermético, vamos lo soy. Porque mira que me he cruzado gente durante estos años de andar por las alturas de mis parajes favoritos, y no solía parar con alguien durante esos momentos. Ya sean las chicas de los perritos o algún cazador que observa con prismáticos desde la altura por donde va a ir el fin de semana a pegar tiros.
Como tantas otras mañanas. La chica de los perritos (la simpática) que siempre te da los buenos días iba delante mío, no diré paseando a los perros, porque mas bien eran ellos los que tiraban de ella. En fin que ha escuchado que llegaba y ha mirado para atrás. Pero hoy en lugar de darme los buenos días como de costumbre se ha esperado en lo alto del montículo a que llegara y ha venido conmigo todo el camino hasta la bifurcación de dos cercados en que se ha despedido diciéndome que tomaba aquel por dar mas vuelta.
Es una preciosidad de chica y resulta que aun lo es mas por como parece ser según hablaba. Mi hermetismo se ha ido al carajo, me ha roto un poco la rutina de solitario. Pero ha estado bien.
Vuelta a lo mío, mirar, y hay que ver la cantidad de cosas que te puedes encontrar que según las fotos que cuelgo hoy podría parecer que se hicieron en días diferentes, cuando lejos de ello todas se han tirado con unos minutos de diferencia entre ellas. Y he vuelto a pensar que la belleza es algo totalmente subjetivo y nada mas exacto que el significado de esta palabra.
Eterno buscador de belleza, hasta incluso donde pareciera que es imposible encontrarla. Hasta en ese extremo si miramos con insistencia al final aparece aunque sea tan solo un hilito. Ya sea la hierba incipiente que empieza salir tras las ultimas lluvias aun llena de gotitas de roció de la noche anterior, luego la fragancia de la que ya están y va creciendo mas, o los arbustos junto al camino en el parque de la Coria. Los reflejos del sol sobre las ramas y una flor que se escapa de la suya y se cuela entre estas otras.
Las hojas caídas en este otoño, o la luz que incide en unas hojas de palmera que ya no se secara porque ha llovido por fin.
Pero hoy, el cielo esta de un azul rabioso con algunas nubecillas aquí y allá. Y sin embargo unos instantes después cambia el paisaje porque en medio del azul aparecen parte de las montañas con una neblina que cambia el color hacia amarillos rosáceos y blanquecinos de brumas y los verdes se difuminan en una veladura de libro.
Vuelvo a cruzarme a la chica, que me dice que ya va de vuelta para abajo, con la agenda en el móvil ya colocada aprovechando el paseo a los perros. Y al rodear la esquina de Santa María me encuentro con la otra chica que también me suelo cruzar y ¡bingo! también está habladora, quejándose del aire helado que viene de la nieve de las otras montañas de al otro lado mientras se aleja en dirección a su casa.
Ahora ya solo por fin, me encamino por la acera de granito (estamos en una ciudad medieval) que lleva a la alberca y que mas adelante me llevara a bajar hacia el final del paseo, cuando observo en mitad de ella lo mas raro que he visto nunca; ¿Una culebrilla de herradura anormalmente tranquila y quieta, con dos colas en cada extremo? ¡Imposible! Me acerco aun mas y no, claro, es una culebrilla dándose un festín con una lagartija. Me ha dado pena porque estaba en mitad de la acera y con lo que suelen pasar por ahí los gamberros que tiran las latas de refrescos a la alberca si la encuentran, tendrá las horas contadas. Y seria una lastima entre otras cosas, por que ya quedan pocas de esta clase en nuestra tierra.
Cruzarte y entablar conversacion con ja chica te ha soltado la lengua, o el teclado, hoy tu entrada mas larga y muy amena. un abrazo
ResponderEliminarSerá eso. Ja,ja...
ResponderEliminarSalud.
Beautiful scenes with a touch of melancholy. However, that creature with a long beak is scary !
ResponderEliminarEs inofensiva esa criatura, excepto para la que se esta comiendo...Ja, ja, ja...
EliminarMe dan escalofríos todo tipo de serpientes... ja,ja, ja... aunque ahora que ya me he hecho mayor, menos que cuando era joven.
ResponderEliminarA mi me da más pena la pobre lagartija que ya no tiene salvación.
Bellísimas fotos, Erik y buen paseo, hoy parece que muy bien acompañado.
Si es una chica muy agradable y muy mona.
EliminarBesos
Sólo tú puedes describir con esa perfección los colores del paisaje.
ResponderEliminarMuy bellas tus fotos y ese paseo en compañía. Has pillado a la culebra en el momento justo.
Me encanta el blues.🎵
Besos
Es que el blues es algo maravilloso y esta canción una pasada.
EliminarBesos
Hoy lo has bordado, Erick, seguramente ayudó socializar con las chicas, pero ese paraje, esa luz, dan para que esas fotos se hagan "solas". Yo solía pasear por el paseo de la Playa, antes de mi estado actual (apenas me puedo mover sin riesgo de caída), y siempre se me criticaba por hacer las mismas fotografías y yo, siempre les contestaba... "no, cambia la luz, el cielo ... y el movimiento de la Tierra (y lo decía sin reírme).
ResponderEliminarEnhorabuena, texto, imágenes, música (una pasada), magnífico.
Vivamos, Erick, es lo que hay, la belleza solo la ve quien sabe verla.
Tengo que hacer como seis o siete kilómetros diarios de lo contrario mi tobillo que funciona a su aire deja de funcionar del todo y no me sujeta, y ya me rompí el peroné porque al pisar unas hierbas mojadas se me dio la vuelta para atrás el pie y caí encima de el, así es que no queda mas remedio que eso, o los ejercicios diarios y eso es muy aburrido.
EliminarSalud
Hoy has tenido un paseo movidito, si eso ha influido en que escribas más, bienvenido y no seas tan hermético
ResponderEliminarMe voy corrigiendo un poco. Sera la edad.
EliminarSalud