No se por que el tiempo se paro aquella noche mientras cruzaba la carretera que separa la calle del "paseo". Recuerdo la niebla y la tenue luz mortecina de los faroles apenas dos, quizás tres, los rayos verdosos que proyectaban sobre la pantalla que formaba en esta las sombras de las ramas de los árboles y que escapaban sorteándolas. Me pare un momento antes de adentrarme por entre ellos para cruzar el parquecillo en se-mi penumbra augurándome un viaje fantástico .
Minutos antes la había dejado y ahora solo pensaba en su cara. Y en mis oídos, o mejor en mi cabeza sonaba . . . "The Real Me"
en, 7.10.06
Escribes con el corazón. ¡Qué bonito, hijo!
ResponderEliminarEse fue el gran amor.
EliminarQue le vamos a hacer...
Tienes suerte de recordar y haber vivido un gran amor. No todo el mundo puede sentirlo.
ResponderEliminarUn beso, Erik
Anoche cuando subí la entrada al buscar la foto del parque me salió una suya y tengo que reconocer que ver esa cara y sobre todo sus labios me hizo pensar cosas raras.
EliminarSeguro que habría dado cualquier cosa por besarles solo una vez aunque el bicho ande galopando por doquier. Me imagino que las madrugadas son muy traidoras para estas cosas porque los ojos se ponen un tanto pichurri...
Besos
Todavía no se había ido y ya la echabas de menos.
ResponderEliminarMe siento muy identificada.
Un saludo.
Ay Né. Se volvió crónico.
EliminarBeso
Había leído el texto sin Fijarme en el
ResponderEliminartítulo. Siempre hablas de ella con nostalgico orgullo. Creo que estas bien.
Saludosss, Erik
Sí. Es que hay mujeres que lo tienen casi todo.
EliminarSon bellas, superdotadas, con las que nunca te aburrirías.
Bueno lastima que nada sea eterno. Pero Mientras duro fue bueno.
Salud