Mira que había pasado veces por esa calle y jamas me había fijado en todos los garitos que la pueblan. Otro día pondré de nuevo una foto de ella.
Lo cierto es que vi el rotulo de uno de ellos y me llamó la atención. Por eso entre. Se llamaba "María Mandiles" o algo así porque no recuerdo si antes o después del nombre llevaba algo mas, me vino a la memoria, y mira que hace tiempo, yo era un chavalin pero la recuerdo perfectamente siempre con un delantal, el pelo recogido con un moño que dejaba algunos mechones sueltos aquí y allá, enjuta con una gran cantidad de arrugas a lo largo de su cara que daba la impresión de estar muy trabajada, no se que edad podría tener pero a mi me parecía muy vieja. Corrían leyendas de aquellas y de aquellos años grises de que si había estado en el sitio del Alcázar, en Toledo junto al Moscardó. Creo que bebía bastante y nunca rechazaba un vaso mas bien una caña de vino que tomaba de una vez y luego se iba. Aun recuerdo el olor agrio de aquel vino. La llamaban como en el letrero pero terminado en "A" y con el articulo delante. Pero lo que me hizo de verdad entrar era la música que salia. No había mucha gente en la barra quizás solo un tipo hablando con el camarero. Sonaba Dead Flowers una versión rara. Era temprano quizás por eso no había nadie aun, me fije y tenían como una sala de exposiciones pero no recuerdo si había muchas mesas. Si había colgadas fotos así mientras me tomaba una cerveza mire las fotos todas en blanco y negro que recuerdo que me gustaron mucho quizás porque estaban desprovistas de artificio. Mire y la autora era una chica. Luego me fui rápido hacia el conservatorio, la nena terminaba la primera clase y tenia que darle la merienda antes de la siguiente.
¿Y cuáles son las flores marchitas?
ResponderEliminarUna imagen, un olor, un sonido... cualquier pequeño detalle tiene el poder de disparar los más curiosos recuerdos
Besos, Erik
Si pero "Dead Flowers" me hizo entrar. Si no hubiera sonado esa canción quizás no habria pasado adentro.
EliminarBesos
Pues me parece un nombre estupendo, seguro que no se le olvida a nadie... :)
ResponderEliminarSalud
Hay restaurantes por todo el país con ese nombre Genin, tu ponlo en Internet y veras...
EliminarSalud
Me encantó tu historia.
ResponderEliminarOjalá vuelvas y cuentes historias de flores, mandiles, mujeres, vinos y rosas?
Un beso
Seguro que volveré pero ahora la alumna ya es maestra y pianista. Y tiene treinta.
EliminarBeso
Curiosa historia.
ResponderEliminarBesos.
Paso hace ya una pila de años. Me tire ocho años llevandola todas las tardes al conservatorio empiezan muy peques pero en plan profesional. Y mientras hay que rellenar las horas.
EliminarBeso
Me gustó el detalle de la merienda entre clase y clase.
ResponderEliminarY si, lo que hace que entremos en algunos baretos es la música que suena. Y muchas veces -no todas- asociamos música y lugar.
Me tire en ese conservatorio diez o doce años. Primero con la grande y luego con la peque, que dijo que colgaba la música. Ahora empezara el doctorado es bioquimica (piano y saxo). La otra es profe por música y pianista. Pero le gusta mas enseñar a los crios de primaria. Así es que ella misma. Pero me lo pase pipa esos años por eso lo de la merienda. Ya sabes en la música entran muy pequeños pero van desde el primer curso en plan profesional así es que no se pueden permitir suspender porque van a la calle. Y yo ahí de padre soltero entre todas esas madres maravillosonas. Algún día contare alguna de esas tardes. Y entre clase y clase escapadita a veces como ahí arriba.
EliminarSalud